Agregar una etiqueta a nivel de tabla le da a toda la tabla un rótulo claro—Marketing, Inventario, Campaña 2025—para que tú y tu equipo reconozcan rápidamente su propósito. Esta etiqueta única se convierte en un filtro útil y una señal de organización en todo tu espacio de trabajo, ayudándote a encontrar y agrupar tablas según su contexto.

Esto es importante porque, a medida que los espacios de trabajo crecen, saber para qué sirve cada tabla ahorra energía mental. Un sistema de etiquetado consistente aporta organización inmediata y facilita la navegación cuando manejas muchos conjuntos de datos o proyectos distintos.

En la práctica, etiquetar una tabla como “Onboarding de Clientes” ayuda a los compañeros a saber de inmediato dónde agregar nuevos clientes y qué procesos seguir. Esto reduce el tiempo de incorporación y mantiene a todos alineados en el flujo de trabajo.

Otro ejemplo es etiquetar tablas estacionales con nombres como “Promoción Festiva 2025” para separarlas de datos permanentes. Cuando termina la temporada, puedes archivar o filtrar esas tablas de manera adecuada sin confusión.

Una buena etiqueta actúa como un rótulo en una carpeta: simple, visible y sorprendentemente eficaz para mantener sistemas complejos ordenados y fáciles de buscar.